Luxación del tobillo (niño)
La luxación del tobillo se produce cuando una fuerza intensa empuja un hueso del tobillo fuera de su lugar. Para tratar esto, el hueso se debe volver a colocar en su lugar. Esto se denomina reducción de la luxación.
Las luxaciones de tobillo provocan dolor e hinchazón. A veces, el tobillo se ve azul, morado o gris (cambio de color). El área parecerá deformada. Las luxaciones de tobillo a menudo se producen con esguinces y, a veces, con fracturas.
Se debe volver a colocar una luxación en su lugar lo antes posible. Un hueso que está fuera de lugar durante demasiado tiempo puede causar daño duradero en las articulaciones, los nervios o los vasos sanguíneos. Con frecuencia, se administran analgésicos i.v. (intravenosos) antes de una reducción. En la mayoría de los casos, los huesos vuelven a su lugar fácilmente. En otros casos, se necesita cirugía . Se puede realizar una radiografía después de la reducción para ver cómo se ve la articulación.
Un niño con una luxación articular probablemente se envíe a un médico especialista en huesos (ortopedista) para su evaluación y seguimiento.
En función de la gravedad de la lesión, el tobillo puede mantenerse en su lugar con un estabilizador. Esto limita el movimiento articular para que el tobillo pueda sanar. El proveedor de atención médica decidirá qué tipo de estabilizador usar. Será un yeso, venda, férula o bota.
Es probable que a su hijo también se le indiquen muletas para evitar cargar peso en el tobillo lesionado.
Cuidados en el hogar
Medicamentos
-
El proveedor de atención médica puede recetarle medicamentos para el dolor o la hinchazón. O su hijo puede usar analgésicos de venta libre según las indicaciones del proveedor. Siga las instrucciones del proveedor cuando le administre estos medicamentos a su hijo.
-
Siempre hable con el proveedor de su hijo antes de administrar estos medicamentos si su hijo tiene enfermedad hepática o renal a largo plazo (crónica) o si alguna vez tuvo una úlcera gástrica o sangrado gastrointestinal.
-
No le dé ibuprofeno a un niño menor de 6 meses.
-
No le dé aspirina a su hijo .
Cuidados generales
-
Haga que su hijo descanse. Su hijo no debe caminar ni soportar peso sobre el tobillo lesionado hasta que el proveedor de atención médica diga que puede hacerlo.
-
Coloque una compresa de hielo sobre el área lesionada durante no más de 20 minutos. Hágalo cada 3 a 6 horas durante las primeras 24 a 48 horas. Continúe utilizando compresas de hielo 3 a 4 veces al día durante los siguientes 2 días. Luego, úselas según sea necesario para aliviar el dolor y la hinchazón. Para preparar una compresa de hielo, coloque cubos de hielo en una bolsa de plástico con cierre hermético en la parte superior. Envuelva la bolsa en un paño o una toalla limpia y fina. Nunca coloque hielo o una compresa de hielo directamente en la piel. La compresa de hielo puede colocarse directamente sobre el yeso, la venda o la férula. A medida que el hielo se derrite, tenga cuidado de que el yeso, la venda o la férula no se humedezcan.
-
Si su hijo tiene una bota, ábrala para aplicar una compresa de hielo, a menos que el proveedor indique lo contrario. Envuelva la compresa de hielo en un paño o una toalla limpia y fina. Nunca coloque hielo o una compresa de hielo directamente en la piel.
-
Mantenga el yeso, la venda, la férula o bota seca. Al bañarse, protéjalo con dos bolsas de plástico grandes. Coloque una bolsa alrededor de la otra. Pegue cada bolsa con cinta adhesiva en el extremo superior o use bandas elásticas. El agua aún puede filtrarse incluso cuando el pie está cubierto. Por lo tanto, es mejor mantener el yeso, la venda, la férula o la bota alejados del agua. Si la férula de fibra de vidrio o yeso se humedece, puede secarlo con un secador de cabello en configuración de aire frío. También se puede utilizar una aspiradora conectada a una manguera para hacer pasar aire a través del yeso y acelerar su secado.
-
Retire las bolsas de plástico y la cinta adhesiva inmediatamente después del baño.
-
Para ayudar a reducir la hinchazón, mantenga el tobillo lesionado levantado (elevado) por encima del nivel del corazón. Haga que su hijo se recueste con una almohada debajo del pie con la mayor frecuencia posible; especialmente mientras se aplica hielo.
Atención de seguimiento
Haga un seguimiento con el proveedor de atención médica de su hijo según se lo indiquen. Si su hijo es derivado a un médico ortopédico, consulte a ese médico de inmediato.
Si se tomaron radiografías, se le informará sobre cualquier hallazgo nuevo que pueda afectar la atención de su hijo.
Notas especiales para los padres
Consulte al proveedor de atención médica de su hijo sobre los ejercicios de tobillo para mejorar la fuerza de tobillo de su hijo y la amplitud de movimiento. Los ejercicios ayudarán a su hijo a volver a sus actividades normales más rápidamente.
Cuándo consultar al médico
Comuníquese con el proveedor de atención médica de su hijo de inmediato si:
-
El yeso tiene un olor desagradable.
-
El yeso tiene grietas o fisuras.
-
El yeso o la férula se humedecen o se ablandan.
-
El yeso o la férula de fibra de vidrio permanecen húmedos durante más de 24 horas.
-
La férula o el yeso está demasiado ajustado o demasiado suelto.
-
El pie lesionado tiene más hinchazón o dolor intenso.
-
Hay un aumento de la opresión o dolor debajo del yeso o la férula.
-
Los dedos de los pies de la pierna lesionada están fríos, azulados, entumecidos o con hormigueo.
-
La lesión no parece estar curando.
-
Su hijo no puede mover los dedos del pie de la pierna lesionada.
-
La piel se ve azul, morada o gris (cambió de color), tiene ampollas o está irritada.